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Ciencia en pocas palabras, Árboles sintéticos contra el CO2 (natural speech)

Árboles sintéticos contra el CO2 (natural speech)

Un equipo de científicos estadounidenses ha desarrollado un árbol sintético capaz de atrapar el dióxido de carbono a una velocidad 1.000 veces superior a la de sus homólogos naturales.

Según Klaus Lackner, profesor de geofísica en la Universidad de Columbia y principal artífice del árbol sintético, cuando el viento atraviesa sus “hojas” de plástico, el dióxido de carbono queda atrapado en una cámara, donde se almacena en forma líquida. Con este dispositivo Lackner pone fin a una década de trabajo persiguiendo el desarrollo de un secuestrador de carbono ambiental, es decir, un dispositivo capaz de atrapar el CO2 sobrante de la atmósfera para frenar el calentamiento global. El papel de estos secuestradores será fundamental teniendo en cuenta que, según un estudio publicado recientemente en la revista Science , los niveles actuales de CO2 (385 partes por millón) son anormalmente elevados, concretamente un 38% superiores a los alcanzados hace 2,1 millones de años .

Aunque el invento no deja de suscitar un cierto dilema. ¿Servirá para reducir los niveles actuales de CO2 y contribuir a mejorar la salud del planeta? o por contra, ¿servirá para que las potencias econónomicas e industriales actuales puedan seguir contaminando sin incrementar los niveles de CO2? El futuro lo dirá...

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Árboles sintéticos contra el CO2 (natural speech) Synthetic trees against CO2 (natural speech)

Un equipo de científicos estadounidenses ha desarrollado un árbol sintético capaz de atrapar el dióxido de carbono a una velocidad 1.000 veces superior a la de sus homólogos naturales.

Según Klaus Lackner, profesor de geofísica en la Universidad de Columbia y principal artífice del árbol sintético, cuando el viento atraviesa sus “hojas” de plástico, el dióxido de carbono queda atrapado en una cámara, donde se almacena en forma líquida. Con este dispositivo Lackner pone fin a una década de trabajo persiguiendo el desarrollo de un secuestrador de carbono ambiental, es decir, un dispositivo capaz de atrapar el CO2 sobrante de la atmósfera para frenar el calentamiento global. El papel de estos secuestradores será fundamental teniendo en cuenta que, según un estudio publicado recientemente en la revista Science , los niveles actuales de CO2 (385 partes por millón) son anormalmente elevados, concretamente un 38% superiores a los alcanzados hace 2,1 millones de años .

Aunque el invento no deja de suscitar un cierto dilema. ¿Servirá para reducir los niveles actuales de CO2 y contribuir a mejorar la salud del planeta? o por contra, ¿servirá para que las potencias econónomicas e industriales actuales puedan seguir contaminando sin incrementar los niveles de CO2? El futuro lo dirá...